Debido a que todos o una gran mayoría de nosotros hemos sido condicionados desde pequeños para pensar como empleados y convertirnos en buenos trabajadores por cuenta ajena, para muchos emprendedores y empresarios, cuando empiezan a trabajar por su cuenta es todo un reto hacer el cambio.
Aunque sepamos que tenemos que empezar a pensar en grande, ser creativos, identificar las oportunidades de valor, afrontar riesgos, no es lo mismo saber qué es lo que tienes que hacer a saber cómo hacerlo.
Condicionados por la forma de pensar que se nos ha inculcado seguimos trabajando duro y buscando formas de evitar riesgos y crear rutinas. Siempre hay que tener en cuenta que cuando eres dueño de un negocio nadie te va a decir qué hacer.
Cuando emprendemos un negocio se nos ocurre una de estas 3 posibilidades:
– Aceptamos nuestra nueva realidad y hacemos todo lo posible para desarrollarnos.
– Trabajamos muy duro y nunca pasamos de tener resultados mediocres porque nuestra mente nos boicotea.
– No sabemos cómo salir adelante con el proyecto, encontramos excusas constantemente y nos damos por vencidos.
Un dato de valor que deberás tener en cuenta siempre para formar tu mentalidad de empresario:
Las personas que entienden que son ellas, y sólo ellas, las responsables de su propio éxito son las únicas que consiguen resultados extraordinarios. El resto sigue esperando que venga alguien a decirles qué es lo que tienen que hacer.
Si estas buscando emprender, este vídeo es para Ti.